SEXTING
consejos para
estar más
seguros

Un proyecto de
Liga Juvenil de Defensa de Internet

Qué es

La tecnología nos ha permitido nuevas formas de relacionarnos sexual y/o afectivamente. Una de estas formas es el sexting, práctica por la que enviamos y recibimos texto, fotos, audios y videos sexualmente explícitos previo consentimiento. Para ello, usamos aplicaciones de mensajería instantánea como: Instagram, WhatsApp, Telegram, Facebook Messenger, entre otras.

Para sextear, ten presente que la palabra clave es el consentimiento. El enviar una imagen, un audio o un video es una decisión que debes tomar de manera libre, sin presiones ni amenazas. Además, quien reciba este material debe manifestar su deseo de querer recibirlas y entre ustedes generar compromisos de privacidad, seguridad y conservación del material íntimo.

Así, respetando el consentimiento, el sexting puede ser una práctica saludable para nuestra sexualidad. De lo contrario, puede traernos muchos riesgos.

Cuando no hay consenso

Cuando el intercambio de contenido sexualmente explícito se da bajo presión, amenaza y/o sin consentimiento puede traer muchos riesgos para quienes lo practiquen. Muchas veces esta situación suele venir acompañada de otros actos violentos, como acoso por redes sociales o vía telefónica. Lamentablemente, es usual que mensajes, videos o audios que fueron compartidos vía sexting sean filtrados públicamente por quien recibió los mensajes. Inclusive, tras esta primera filtración, el material puede ser compartido a muchas otras personas (“pasar el pack”), lo cual vulnera la privacidad de la víctima infinitas veces.

En estos casos, es un error común escuchar que se culpa a la víctima por haberse hecho fotos o videos de ese tipo. Recuerda que los únicos culpables son quienes difunden y/o publican dichos mensajes sin tu consentimiento.

Consecuencias reales

Registrar, difundir e incluso poseer material íntimo que ha sido obtenido sin consentimiento puede constituir diferentes delitos, algunos de ellos muy graves como el de pornografía infantil, que se castiga hasta con 12 años de prisión efectiva, o el de acoso sexual, por el que se puede recibir una condena de hasta 8 años de prisión efectiva. Además de la pena de cárcel, quien comete estos actos delictivos deberá pagar una suma de dinero como indemnización por daños y perjuicios para la víctima. Además, se pueden recibir sanciones en el ámbito laboral y/o recibir una expulsión de tu universidad o centro educativo.

Uno de los impactos negativos de la difusión de material íntimo sin consentimiento es el daño psicológico y emocional que experimentan las víctimas al ver violentada su privacidad. Es normal experimentar ansiedad, miedo, pánico, etc. Por ello, es muy importante que puedas contar con el apoyo de tu red de soporte (círculo de amistades, familia, colectivos feministas, ONGs, entre otros).

El sexting explícitamente consensuado es un ejercicio de la libertad de vivir tu sexualidad como mejor te parezca. Por eso es importante respetar la expectativa de intimidad y privacidad asociadas a esta práctica. Toma en cuenta las potenciales graves consecuencias de transgredir dicha expectativa.

No olvidar

Si ves vulnerada tu privacidad debido a la difusión de material íntimo, recuerda que esto no es tu culpa y que se ha realizado transgresión de tu confianza e intimidad.

¿Qué aplicación de mensajería te conviene?

Cifrado de extremo a extremo. Cuando la comunicación entre dos o más celulares está protegida por un código que nadie más puede interpretar. Es como si hablaran un lenguaje que nadie más conoce, ni siquiera la empresa que presta el servicio.

¿Opcional? Funciones que debes activar especialmente en la configuración de tu aplicación. Busca la opción de “Chat Secreto” o “Conversación Segura”.

[1] Únicamente disponible para Conversaciones Secretas en Messenger.

[2] Desaparición de mensajes en Signal.

[3] Habilitado para chats secretos en Telegram.

[4] Eliminado automático de mensajes en Telegram.

[5] Sobre las capturas de pantalla en Telegram