ANÁLISIS

4.01 Cuida tu huella digital

Cuando utilizamos Internet, construimos nuestra identidad digital por medio del contenido que compartimos y consumimos. Este contenido puede incluir los videos que compartes en TikTok, los canales a los que estás suscrito en YouTube, las noticias que buscas en Google, las publicaciones a las que les das ‘me gusta’ en Facebook y las fotos en las que te etiquetan Instagram. Toda esta información forma parte de tu 👣 huella digital. La huella digital no es mala. Es normal y todos la tenemos; pero puede revelar mucho sobre ti: 

👉 Por ejemplo, si tus amistades te etiquetan en una foto en la que aparece tu uniforme del colegio, o tu centro de trabajo y esa foto es pública, una persona que te quiere hacer daño puede encontrarla fácilmente y usarla para deducir dónde estudias, dónde trabajas y quienes son las personas a las que frecuentas. 

Por eso, el primer paso para cuidarte en Internet es decidir qué información quieres que sea parte de tu huella digital y qué información prefieres compartir de manera más privada. 

💭 Para tomar esta decisión puedes preguntarte: ¿Qué información quiero compartir en esta publicación? ¿Quién quiero que la vea? ¿Quién no quiero que la vea?  ¿Cómo podrían utilizarla para hacerme daño? ¿Cómo me sentiría?

Respondiendo estas preguntas descubrirás que hay información que te gustaría que sea vista por muchas personas, y que hay información que prefieres reservar para ti o tus círculos de confianza. En este contexto la entendemos como información sensible.

¿Qué es la información sensible?

📝 La información sensible es información que quieres resguardar. Es importante cuidarla porque puede ser utilizada para que personas que no conocemos, o en las que no confiamos, nos hagan daño.

La información sensible que debemos proteger podría incluir:

  • Tus datos personales: como tu nombre, tu número de celular o tu dirección, etc; 
  • Información que alguien puede usar para deducir quién eres, dónde vives o dónde estudias; 
  • Información que no quieres que nadie más vea porque te hace sentir en peligro o insegura: como los mensajes que intercambias con tus amistades, tus fotos íntimas o información sobre tu orientación sexual. 

Al identificar tu información más sensible, tendrás la habilidad para tomar mejores decisiones sobre dónde y cómo quieres publicar tu información, quién quieres que la vea, y así cuidarte de conductas violentas.

🌈 Por ejemplo, hay chicas lesbianas o bisexuales que tienen miedo de contarles a otras personas sobre su orientación sexual para evitar discriminación. Si por el momento prefieren que sólo personas en las que ellas conozcan ese aspecto de su vida, lo pueden compartir mediante mensajes privados. Cuando estén listas para contarle a más personas, lo publicarán en sus redes sociales y se convertirá en parte de su huella digital. Solo ellas tienen el derecho de decidir cuándo, cómo y a quién le quieren dar esa información.

Recuerda que solo tú tienes el poder de decidir qué información harás pública y qué información harás privada. Es una decisión personal, muy importante y que debes tomar con mucha responsabilidad.