Las campañas electorales, hoy en día, se han trasladado en cierta medida a espacios como Internet y redes sociales. Usando estos medios se pretende captar la atención de la ciudadanía y obtener resultados electorales favorables. ¿Qué nuevas formas de proselitismo políticos podemos observar?
Las redes sociales como vehículo de información política
Hemos podido observar en el último año que distintos actores políticos y candidatos presidenciales utilizan redes sociales para hacer llegar sus mensajes. De entre estos, podemos destacar las transmisiones en vivo (o lives) que puedan utilizar para interactuar con la ciudadanía y/o hacer llegar sus propuestas. Este supuesto es especialmente interesante porque encajaría dentro de la definición de proselitismo político realizada por el Jurado Nacional de Elecciones (Resolución Nº 0306-2020-JNE):
Proselitismo político
Cualquier actividad destinada a captar seguidores para una causa política.
Cabe tomar en cuenta que el sentido original de dicha norma estaba más centrada en el ámbito del proselitismo político “tradicional”: mítines, caminatas, caravanas, encuentros, cenas, etcétera. Ahora bien, cabe realizarse la pregunta si actividades hechas en Internet por los candidatos, tales como streams o lives también calzan en dicha definición. Somos de la opinión de que sí: en la medida que las acciones realizadas en espacios digitales son también plasmación de las realizadas en espacios físicos, lo realizado a través de Internet también cabe dentro del ámbito de aplicación en la medida que cumpla con la finalidad y los supuestos establecidos en la norma.
La definición de proselitismo político adoptada por el JNE es lo suficientemente amplia para abordar las situaciones previamente descritas. Así, si un candidato realiza una transmisión en vivo vía Facebook o Instagram a través de la cual comparte sus propuestas políticas, brinda sus pareceres y opiniones con la finalidad de captar seguidores para una causa política estaríamos ante un acto de proselitismo político. De la misma manera, si a través de Twitch un candidato hace un stream en miras a poder interactuar con la ciudadanía para contar con sus votos, estaríamos ante un acto de proselitismo político. Ahora bien, teniendo en cuenta ello, estos actos de proselitismo político tienen también limitaciones legales en su realización, las cuales veremos a continuación.
¿Cuánto se puede gastar en un evento proselitista?
La Ley de Organizaciones Políticas establece en el artículo 42 qué conductas están prohibidas al momento de realizar actividades políticas. Así, se indica que los candados en un proceso electoral “están prohibidos de efectuar entrega o promesa de entrega de dinero, regalos dádivas, alimentos, medicinas, agua, materiales de construcción, enseres del hogar u otros bienes, de manera directa, o a través de terceros por mandato del candidato y con recursos del candidato o de la organización política”.
Esta prohibición tiene dos supuestos de excepción:
- La entrega de bienes para consumo individual e inmediato con ocasión del desarrollo de un evento proselitista gratuito.
- La entrega de artículos publicitarios considerados como propaganda electoral.
En ninguno de estos casos cada bien entregado no debe exceder el 0.3% de una UIT. Es decir, para el año 2021, cada bien no debe exceder los S/ 13.20.
Teniendo en cuenta la posibilidad de realizar eventos proselitistas en Internet, un candidato presidencial que realiza una transmisión en vivo no podría entregar o prometer la entrega de dinero, regalos, dádivas o alimentos. Sin embargo, ello está permitido si el bien está destinado para el consumo individual e inmediato con ocasión del desarrollo de dicho evento, y siempre que su valor no sea superior a S/. 13.20. También estaría permitida la entrega de artículos publicitarios como propaganda electoral (polos, peluches, lapiceros, gorras, etcétera). Así, si un candidato transmite en vivo y sortea bienes como polos del partido, esto sería legal siempre que el valor no supere lo indicado previamente.
¿Los partidos políticos pueden recibir aportes a través de lives o streamings?
El artículo 30 de la Ley de Organizaciones Políticas establece los supuestos bajo los cuales estos pueden recibir financiamiento privado. Así, se establece que pueden recibir aportes o ingresos obtenidos a partir de la realización de actividades proselitistas. Esto, siempre y cuando los aportes en efectivo estén 1) debidamente bancarizados; o, 2) se permita identificar a los aportantes y el monto del aporte con comprobantes. Además, no puede superar el monto de 100 UIT (S/. 440,000) por actividad proselitista.
De acuerdo a ello, una organización política puede realizar streams y obtener donaciones por parte de quienes sean seguidores y así poder financiarse. Ya sea a través de estrellas en Facebook, o donaciones en dinero a través de Youtube o Twitch, etcétera, una organización política o un candidato puede recibir financiamiento privado lícito. Además, estos mecanismos de donaciones realizados en streams permiten la bancarización de los aportes (las donaciones solo se dan a través de transacciones realizadas con tarjeta de crédito y/o débito), con lo que se cumple el supuesto requerido por la norma.
Ahora bien, el mencionado artículo dispone que, previo a la realización de una actividad proselitista, la organización debe notificar a ONPE en un plazo no menor de siete (7) días previos a su realización. Esto, con la finalidad de ejecutar la supervisión respectiva.
Sobre este punto, teniendo en cuenta que asumimos que hay ciertas actividades en Internet y redes sociales que podrían ser calificadas como proselitismo político, creemos que la mencionada obligación de notificar resulta siendo poco razonable. En efecto, la naturaleza misma de estos eventos en Internet es que suelen darse de manera frecuente y que responden muchas veces a cuestiones coyunturales. Por lo tanto, esta disposición podría limitar una correcta realización de actividades proselitista en línea.
Teniendo en cuenta que hoy en día sí se están realizando actividades de proselitismo político en línea, sería importante que los legisladores y los organismos del sistema electoral respectivo evalúen realizar regulación específica para abordar esta problemática. Esto permitiría una mejor fiscalización de la actividad de las organizaciones políticas, tanto en el financiamiento como en el gasto, ya que es muy probable que en las próximas campañas electorales se sigan utilizando estos medios o que se impulse mucho más su uso.
Director Ejecutivo
Abogado por la Pontificia Universidad Católica del Perú.
¿darle like a una publicación de un candidato es hacer proselitismo político?