Midiendo la violencia digital: un largo camino por recorrer

Actualmente, existe un gran avance respecto al reconocimiento y tratamiento de la violencia de género. Sin embargo, esto no ocurre respecto a la violencia de género en línea. Recién, en 2018, se publicó el Decreto Legislativo N° 1410 que añadió 4 expresiones de violencia de género en línea en el Código Penal peruano. Antes de esta norma, se esperaba que la violencia digital sea resuelta desde la autogestión y tomando las soluciones que las plataformas de internet ponen a nuestra disposición. El desarrollo de políticas públicas y normativas referidas a este tipo de violencia aún es incipiente y muy escaso

Consecuentemente, recién en 2018, a través de la plataforma “Nos protegemos contra el acoso virtual”, desde el Estado, se empezó a recoger información y datos sobre violencia de género en línea. A partir de la denuncia y reporte de casos de este tipo de violencia se han generado estadísticas respecto a las manifestaciones de este tipo de violencia, sus modalidades, la frecuencia y el perfil de las víctimas. La creación de esta plataforma de recojo de información es un avance importante. No obstante, este sistema aún es perfectible. El formulario, así como el estudio de la data recogida debe responder a un sistema de recopilación y recopilación estadística que tome en cuenta las particularidades de internet, entendido como un espacio diferente, con características propias. Asimismo, se debe tener en cuenta el funcionamiento y modus operandi de la violencia de género en contextos tecnológicos, la identidad de los agresores, sus potenciales víctimas, así como otros elementos propios de este fenómeno.

Debido a la trascendencia de la violencia de género digital en los derechos y la incidencia de estos casos, es necesario contar con data específica y actualizada sobre la ocurrencia de estos casos. Contar con un sistema de medición adecuado genera grandes beneficios en la creación y ejecución de políticas públicas referentes a su prevención y sanción. Esta información ayuda a entender quienes son las posibles víctimas según edades, grupos, condición económica, sexo, género, identidad de género, etc. Los datos ayudan a identificar qué medidas podrían ser efectivas y eficientes para prevenir, investigar y sancionar la violencia digital y también, para combatirla. 

Además de la mejora de este sistema, es preciso tomar en cuenta que existen otros factores determinantes que inciden en la falta de un sistema de recopilación y recojo de información actualizado, veraz y específico. En primer lugar, la falta de legitimidad del sistema de justicia en la atención de casos de violencia de género genera la desincentivación de las víctimas a denunciar. En segundo lugar, existe un problema desde el tratamiento, investigación y judicialización de casos de violencia de género en línea que responde a la falta de capacitación y sensibilización de policías, fiscales y jueces respecto a la trascendencia de este tipo de violencia. En tercer lugar, la configuración de los tipos penales y la regulación en general de la violencia de género en línea pone a disposición de las víctimas herramientas de denuncia que terminan en procesos tardíos y de revictimización. En cuarto lugar, aún existe desconocimiento sobre la identificación de la violencia de género en línea como delitos denunciables y perseguidos por el ordenamiento jurídico peruano.

Esta situación no es ajena a los demás países de la región. Por ello, desde Navegando Libres por la Red, junto con el Centro Latam Digital se promovió el estudio llamado “Mediciones de la violencia de género digital en América Latina y el Caribe”. Esta investigación toma en cuenta, entre otros proyectos, nuestra experiencia en el estudio de la violencia de género en línea, así como nuestro Informe Técnico “Conocer para resistir” a través del cual nuestro equipo realiza una investigación-diagnóstico de la violencia de género en línea en Perú. 

Si deseas acceder a este recurso que incluye nuestra experiencia, así como la experiencia de otras organizaciones como Luchadoras, ONG Amaranta, Fundación Karisma, Fundación Datos Protegidos, APC, MariaLab, Ipandetec Centroamérica, Acoso.Online y Sentiido, entre otras; puedes descargar el estudio aquí: http://bit.ly/3lfmtwD.

Esperamos que la información compartida sea de su interés.



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *