Desde hace más de una semana, se han iniciado incendios forestales en diversas regiones del país, así como en distintos territorios de América del Sur. En el caso de Perú, 20 regiones se encuentran afectadas, con mayor impacto en Cusco, Huancavelica, Cajamarca, Amazonas, Ucayali y San Martín. Nuestros bosques están ardiendo.
Desde Hiperderecho, creemos que el contexto nos invita a preguntarnos por nuestra relación con los ecosistemas y el medio ambiente. En un mundo en el que todo pasa tan deprisa, es necesario detenernos a pensar qué cuidado ofrecemos al planeta que nos precede como especie. En ese sentido, desde nuestros ejes de trabajo, encontramos que el desarrollo de las tecnologías carece de una mirada sostenible para los ecosistemas, sino que se basa en un enfoque antropocentrista y cortoplacista.
En la actualidad, la industria tecnológica tal y como está concebida no considera el impacto ambiental del extractivismo de los minerales necesarios para la producción de dispositivos, los residuos electrónicos promovidos por el consumo a gran escala y la obsolescencia programada, las ingentes cantidades de energía necesarias para el funcionamiento de servidores en todo el mundo que contribuyen con las emisiones de gases de efecto invernadero, el agua que se necesita para mantener los centros de datos, los desechos tecnológicos en el espacio o basura espacial, entre otros. En este contexto, los incendios forestales ocasionados nos exigen, como actores del ecosistema digital y en el marco de la gobernanza de Internet, repensar la forma en que promovemos y defendemos la tecnología como libertad, así como enfatizar la conexión entre los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales (DESCA) y la tecnología.
Nos preocupa profundamente esta tragedia, que debe ser considerada una emergencia nacional. Lamentablemente, las autoridades correspondientes, como el Ministerio del Ambiente,el Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI), el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) y la Presidencia de la República, no están abordando esta situación de la manera adecuada, sino que la ciudadanía autoconvocada y organizada, así como las personas voluntarias, han tomado la iniciativa de combatir los incendios. Hasta el momento, esta crisis ha causado la muerte de 15 personas, más de 1800 damnificados y diversas especies de animales seriamente afectadas.
Asimismo, ante esta emergencia, recordamos que las autoridades públicas, especialmente la Presidencia del Perú, tienen el deber reforzado de evitar la desinformación en línea. Mecanismos como los fact checkers no pueden ser utilizados para negar o aplacar la gravedad de los incendios forestales, ni mucho menos inducir a información engañosa para la ciudadanía.
Lamentamos que estos incendios están destruyendo el hábitat de diversas especies de nuestra flora y fauna, afectando, entre otros, al oso de anteojos, una especie vulnerable nativa de los Andes de Sudamérica a la que guardamos especial cariño por integrar nuestra familia y por ser el emblema de nuestra organización: Hiperión, vocero defensor de Internet en el Perú, es un oso de anteojos.
Finalmente, invitamos a la ciudadanía a reflexionar sobre la relación entre la tecnología y el medio ambiente. Compartimos la cartografía elaborada por Coding Rights, que evidencia cómo las tecnologías desempeñan distintos roles en el debate sobre el clima y la justicia socioambiental. Exhortamos a las autoridades competentes a tomar medidas urgentes para detener los incendios en nuestra Amazonía.
Somos una organización sin fines de lucro que cree que la tecnología es una herramienta de liberación social y trabaja para defenderla de cualquiera que la ponga en riesgo.